La concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Valladolid pone al ralentí la reforma del 29 de Octubre
Plantea un estudio en profundidad para "evitar la salida de propietarios de la barriada de Pajarillos contra su voluntad".
Tras el cambio de gobierno en el Ayuntamiento de Valladolid (ahora gobernado por PSOE y TOMA LA PALABRA) el proyecto especulativo que el Partido Popular estaba preparando para la zona Este y el barrio de Pajarillos en particular parece haber entrado en barrena:
"Una operación de tanto calado social y urbano como la prevista en la barriada del 29 de Octubre, en Pajarillos, no se debe hacer a las bravas, recalcan los responsables municipales". Y continuan: «Nos parece esencial salvaguardar el derecho a la vivienda de las personas afectadas directamente. Hay hogares, familias y personas que ahora tienen vivienda, y que después de la operación, como consecuencia de las expropiaciones, no la tendrán. Y también hay otros que están a gusto en su actual vivienda y que se van a ver forzadas a efectuar un gasto que no han decidido, para una serie de mejoras que no quieren». El concejal de Urbanismo y primer teniente de alcalde, Manuel Saravia, se mostró partidario ayer de poner al ralentí el proyecto de reforma de este degradado polígono de viviendas, después de estudiar la documentación de esta operación de regeneración urbana, que, en su primera fase, conlleva la demolición de 174 viviendas y la construcción de pisos de nueva planta.
Lo que no escuchamos aún, sin embargo, es que el nuevo estudio se plantee desde una pespectiva totalmente distinta: SIN EXPROPIACIONES NI DERRIBOS, priorizando las condiciones de vida de las personas sobre los beneficios y el capital.
"Hace falta un estudio en profundidad de la situación para evitar males mayores", reflexiona el edil. Según EL NORTE DE CASPILLA, del que leímos la noticia:
"No solo él cree que este proceso se debe hacer con pies de plomo. Sus socios de gobierno también lo tienen claro, más cuando dentro del colectivo de afectados hay dudas, que han desembocado en algunas protestas vecinales y en la colocación de carteles contra el proyecto. Según los datos aportados por el edil de Toma la Palabra en su blog, de los 174 hogares afectados, 65 estarían dispuestos a cambiar piso viejo por una casa nueva y pagar los 20.000 euros a mayores por el garaje y trastero a los que obligaría el acuerdo. Habría otros cuarenta propietarios proclives a ser expropiados tras recibir 24.000 euros por su hogar y otros 17 que cogerían ese dinero para trasladarse al bloque de apartamentos protegidos. Además, tras estudiar las fichas, Saravia ha detectado también indecisos, así como una treintena familias que quieren quedarse como están, después de haber realizado mejoras en sus pisos que superarían lo que van a recibir en concepto de expropiación y que, además, no pueden hipotecarse más para adquirir una plaza de garaje y un trastero que no les hace falta. En otros casos, no se ha localizado a los propietarios.
Con una casuística tan variada e incluso no cerrada al cien por cien, Saravia señala la intención de cumplir con el compromiso de regeneración de esta barriada, pero sin apresurarse. «Es necesario garantizar que nadie va a ser expulsado de la zona en contra de su voluntad y ni mucho menos que va a perder su vivienda. De ahí que sea necesario corregir el proyecto para evitar que puedan darse esos inadmisibles resultados», recalca el responsable del área de Urbanismo".
estamos atentxs. seguimos descontentxs
